TÉ NEGRO O PU ERH (3ra parte)
Seguimos con el té negro PU ERH, parte del blend MANDARÍN IMPERIAL que está en promoción esta semana. Hoy, ¿les parece bien un poquito de historia?
El té Pu-erh se elabora, tradicionalmente, con las hojas de antiguos árboles salvajes de té, de entre 100 y 300 años, de una variedad conocida como «té de hoja ancha» o con hojas de Camellia sinensis, variedad assámica, que se encuentra en el suroeste de China y en las regiones tropicales limítrofes de Birmania, Vietnam, Laos y las zonas más orientales de la India (como ya vimos cuando hablamos del té rojo Assam).
Los brotes y hojas jóvenes de este varietal están cubiertos de finos vellos, con el leafset (dos hojas y un brote) más grande que otras variedades de té. Las hojas son ligeramente diferentes en su composición química, por lo cual el té preparado es único en sabor y aroma; esta cualidad también lo hace más deseable para el proceso de envejecimiento. Debido a la escasez de viejos árboles salvajes de una única montaña, el pu-erh se elabora con mezclas o blends de hojas de árboles de diferentes montañas de la zona de Yunnan.

Comparación de hoja de un viejo árbol de té (izq) y un arbusto (der).
Las hojas de los árboles son más lisas, de bordes menos aserrados y particularidades estructurales, que les dan un sabor distintivo.
La historia del té pu-erh se remonta a la dinastía Han del Este (25 a 220 d. de C.). Originalmente, se elaboraba en un lugar llamado Xishuang Banna, ubicado en el extremo sur de la provincia de Yunnan. Históricamente, este té se producía para consumo propio de las razas minoritarias y también se exportaba a Tibet, Mongolia o sudeste de Asia. Como era un importante producto de exportación, los comerciantes chinos contrataban tanto la mano de obra local como el transportista y el Pu-erh se cambiaba por caballos u otros productos. El camino utilizado para este negocio se denominó «La Antigua Ruta del Té y los caballos del Tibet». Se consideraba una segunda ruta de la seda, ya que era una ruta comercial muy importante para ellos.
La Antigua Ruta del Té y los Caballo del Tibet comienza a partir de un pueblo llamado Yiwu y recorre todo el camino hasta el Norte. Un experto chino descubrió, recientemente, un mapa completo de la ruta, trazado hace más de 150 años por un misionero francés.
El mapa revela que el camino atraviesa una serie de imponentes montañas, con ríos que las surcan de sur a norte. En términos generales, había seis rutas principales:
Ruta Uno: Comienza en Xishuang Banna y Simao, casa del té Pu-erh, vía Kunming, hacia otra provincia en China hasta Beijing (Pekín).
Ruta dos: Comienza en Pu-erh (vía Simao, Jinhong, Menghai a Daluo) en la provincia de Yunnan hasta Birmania y luego, va de Birmania a Tailandia, Singapur, Malasia y Hong Kong.
Ruta tres: Comienza en Pu-erh vía Xiaguan, Lijiang, Zhongdian en el Tíbet y luego, va de Lhasa a Nepal y la India.
Ruta Cuatro: Comienza en Pu-erh vía Jiangcheng en Yunnan hasta Vietman y luego de Vietman al Tíbet y Europa.
Ruta Cinco: Comienza en Pu-erh vía Simao, Lanchang, Menglian en Yunnan, hasta Birmania.
Ruta Seis: Comienza en Pu-erh vía Mengla en Yunnan hasta Birmania.
El té era abastecido y almacenado en una ciudad llamada Pu-erh, que era el centro geográfico del comercio y la logística de ese producto. Por esta razón el té de las minorías fue llamado así. En la historia, el Pu-erh se consideraba más bien como un té étnico, especialmente elaborado y bebido por las razas minoritarias de la zona. Decenas de miles de caballos y yaks crearon, con sus cascos, una ruta definida sobre un sendero que alguna vez fue indiscernible. Hoy día, aunque las huellas de la antigua ruta están desapareciendo, se conservan sus valores culturales e históricos.